Tomar la decisión de vender un negocio no es sencillo, más aún a la hora de ponerle un precio razonable que siempre termina siendo una decisión muy compleja. Normalmente los vendedores colocan precios superiores a lo que realmente valen, esto debido a que se crea una fuerte unión con el negocio que costó muchos años de trabajo y esfuerzo, y por ciertas razones se decide vender.
Para serles claros, un negocio vale lo que puede generar, que no es otra cosa que el flujo de ingresos que puede arrojar la operatoria del mismo. Si bien existen diversos métodos de tasación, los cuales mencionaremos, el método de flujo de fondos descontados es el más utilizado y reconocido a nivel mundial.
¿Qué procedimientos son los más usados para establecer un precio a tu negocio?
-Método de valuación de activos. Se intenta valorizar los activos que el negocio tiene, a un precio descontarle, para luego descontar lo que el negocio debe. Este método podría servir para una empresa que se esté en un proceso de liquidación, pero no para tasar un negocio en marcha.
-Múltiplos de ventas o de ganancia anual. En base a la venta o ganancia anual, se intenta establecer un múltiplo para así arribar al valor del negocio. Es decir, determinar que, por ejemplo, un kiosco vale seis meses de ventas o dos años de ganancia. Si bien se usa bastante esta metodología, no deja de resultar peligrosa; puede variar demasiado el valor de acuerdo al múltiplo que determines.
-Flujo de Fondos Descontados: Este método se concentra en los flujos de fondos que arrojará el negocio a futuro, los cuales, para valorizarlos al día de hoy, requiere aplicar una tasa de descuento y así encontrar su valor actual.
Sin dudas, este último método es el más profesional, y nos dará una mejor aproximación de cuánto vale un negocio. Un punto clave a tener en cuenta en esta metodología: ser sincero y realista con las presunciones y proyecciones que se hacen a futuro.