Llegó el momento. Hiciste tus números, consultaste con tu familia o tus allegados, y tomaste la decisión de independizarte y dejar de trabajar para alguien más, para emprender tu propio negocio. Entre lo tangible de la realidad que pudiste observar y lo utópico que los sueños permiten imaginar, querés adquirir una franquicia, y en ese momento se mezclan una serie de dudas fundamentales para poder aterrizar todo y empezás a cuestionarte cosas como: ¿Cuál será la más rentable? ¿Cómo elegirla? ¿Qué negocio será el más prudente?

Tener dudas a la hora de adquirir una franquicia no es algo negativo, por el contrario, es la manera de arrancar, pues no hay que dejar nada al azar. Será cuestión de obtener y procesar la información disponible de cada una de las franquicias, bajarlas en papel, y ordenarlas para lograr compararlas.

Así que, pensando en vos, que diste un paso económico importante en tu vida, NegoZona comparte una serie de útiles consejos para apoyarte y para que tengas en cuenta al momento de elegir:

1. ¿Por dónde empezar?

Lo primero que tenés que saber es que en Argentina hay aproximadamente 1.000 marcas de franquicias. Desde hace un par de años, se sancionó la ley de franquicias, la cual le exige a las marcas cumplir con ciertas normas y requisitos para poder franquiciar. Existe además la Asociación Argentina de Marcas y Franquicias (AAMF), desde donde se puede obtener y consultar información de interés, como por ejemplo las diferentes modalidades de franquicias, cuestiones legales, y marcos regulatorios, entre otras cuestiones.

Para poder elegir una franquicia que se adapte a lo que estás buscando, lo ideal es poder conocerlas. Para ello existen algunos sitios Web que agrupan distintas franquicias que se encuentran disponibles. Desde NegoZona somos referentes en ello, y te ofrecemos el poder buscar y comparar muchísimas opciones segmentadas por rubro, inversión requerida, zonas disponibles, entre otros filtros. Haciendo click en el siguiente enlace encontrarás todas las franquicias que tenemos disponibles para vos en NegoZona: Franquicias en Venta

2. Obtené toda la información necesaria y despejá tus dudas

Cuanto más información obtengas, mejor será la decisión que tomes. Indagá todo lo que sea necesario sobre las marcas para lograr despejar dudas y no encontrarte con ninguna sorpresa.

En este punto, algo muy recomendable es conversar con otros franquiciados activos de la marca para que así te cuenten su propia experiencia. No hay nadie que te pueda dar mejor información que un franquiciado que ya opere la marca. Él ya pasó por el mismo proceso que estás encarando, por lo que su experiencia es más que valiosa.

3. Obtené información económica y financiera

Lo primero que tenés que conocer de una franquicia en cuanto a números es qué inversión total requiere. De acuerdo a tu capacidad financiera, este dato te va a permitir ver si la franquicia es viable para vos. Si está dentro de tus posibilidades, empezá a analizar con detalles otros indicadores como: rentabilidad del negocio, regalías que se pagan, y tiempo de recupero de la inversión, entre otras cuestiones.

En definitiva, lo que vas a querer entender es qué inversión te va a demandar y qué te va a dar a cambio, tanto de manera mensual como total del proyecto.
Toda la información debe estar disponible y, lo más importante, debe ser clara. La misma debe estar plasmada y descrita en el contrato que firmes, por lo que tomate el tiempo necesario para evaluar con lupa hasta el último punto. No dejes nada librado al azar, y buscá evitar los errores a toda costa, ya que después podría ser un poco más complicado revertirlo.

4. Franquiciado ¿activo o pasivo?

Esta es una de las cuestiones más importantes a evaluar a la hora de invertir en una franquicia: hablamos de la dedicación y el tiempo que tiene que destinarle el franquiciado al negocio.
La primer pregunta a hacerse es: La franquicia ¿requiere que el franquiciado esté full time atendiendo el negocio? Si creés que vas a invertir en una marca y poner empleados a trabajar, mientras vos continuás con otras actividades, probablemente estés equivocado. La gran mayoría de las franquicias (no digo todas porque hay algunas que no) requieren que quien compra la franquicia, también trabaje. Esto es así porque el modelo de negocio no es rentable si tenés que poner un empleado que se haga cargo de la administración.
Por lo tanto, antes de comprar una franquicia, analizá el modelo y los números, entendé si la misma requiere que el franquiciado sea activo o no, y en tal caso definí el grado de dedicación que vas a poder darle al negocio.

5. Posición de la marca o franquicia

Una de las primeras preguntas que debés hacerte es qué tan conocida es la marca: cuando uno invierte en una franquicia, más allá de recibir un modelo de negocio rentable y adquirir el know-how que te pueda transmitir el franquiciante, está también comprando el reconocimiento del público sobre la marca. Es importante entender esto, y sobre todo poder dimensionarlo y llevarlo al lugar donde vas a instalar la franquicia. Tal vez sea una marca súper reconocida en alguna ciudad o provincia pero, donde vos la querés llevar, puede que no tenga reconocimiento. Esto no quiere decir que la debas descartar, pero tené en cuenta que lograr la captación del público llevará algún tiempo.

6. Los fracasos cuentan, y mucho

Hay muchas marcas que abren constantemente locales, pero ¿es éste un indicador positivo? Si, lo es. Pero no debe ser lo único a evaluar. ¿Cuántas franquicias de esa marca cerraron en el último año? Para bien o para mal, los fracasos también cuentan. Si está dentro de tus posibilidades, investigá si hubo franquicias de la marca a las que no les fue bien y, lo más importante, tratá de encontrar el motivo de dicho fracaso. Ya sea por una cuestión de mercado, ubicación, competencia, o simplemente por mala administración, es interesante conocer la causa para evitar cometer los mismos errores.


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