Invertir o no invertir, esa es la cuestión
Autor: NegoZona || 11 / 05 / 2020



No se trata de cualquier dilema, sino uno mayúsculo o colosal, podría decirse.

Hoy, en medio de una situación tan particular como la pandemia que nos afecta en todos los niveles posibles desde lo personal y lo colectivo, a lo regional, nacional y mundial, no nos queda otra alternativa que afrontarla. Y si sumado a esto evaluamos el escenario económico en que se encuentra la Argentina, tenemos razones suficientes para sentrnos con una una ligera sensación de caos.

Sabemos que parece un panorama bastante desalentador y una forma no muy positiva de empezar con este artículo, pero seguí leyendo que todo tiene un motivo!

Para empezar, todo es cuestión de perspectiva. Las situaciones extraordinarias, sobre todo aquellas en las que parece que todo está perdido y que nada se puede hacer, tienen dos simples maneras de afrontarse, es más, podemos decir que el mundo se divide en dos clases de personas: quienes se someten a ellas, y aquellos quienes las afrontan.
Y es en ese segundo grupo donde se encuentran los inversores. ¿Por qué? Es muy simple: las situaciones extraordinarias requieren afrontarse de una manera extraordinaria. Las mejores ideas que ha tenido la humanidad han nacido producto de una necesidad, como el descubrimiento de una vacuna, o de la bombilla de luz, por dar sólo un par de ejemplos.

Las necesidades nunca dejarán de estar vigentes. Necesitamos comer (franquicias o comercios gastronómicos siguen en funcionamiento), necesitamos vestir, educarnos, e incluso hasta el entretenernos es necesario. La cuestión radica en el ser creativos y, como toda especie que evoluciona, adaptarnos.

Adaptar los comercios a las nuevas tecnologías y empoderarse de sus herramientas es lo que le ha permitido a varias franquicias no sólo mantenerse a flote, sino seguir generando ganancias. Seamos positivos, pongamos todo en perspectiva. Analicemos. Leamos. No hay un método científico que nos permita darle una solución a nuestro dilema, pero sí hay muchas herramientas al alcance de nuestras manos, para ayudarnos a tomar una decisión.

¿Esa inversión que querés hacer está preparada para afrontar un contexto como el que atravesamos ahora? Si la respuesta es un sí ¡adelante con eso! Si la respuesta es un “no”, hay otras preguntas más por hacerse: ¿se puede adaptar?, ¿qué necesito para lograr esa adaptación? Siempre es posible encontrarle una solución ya que, como dijimos, es cuestión de perspectiva; todo emprendimiento bien llevado será exitoso.


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